jueves, 22 de octubre de 2009

Respondiendo a Damián Petruccelli

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Nos llegó a modo de comentario a la nota:
la que publicamos bajo el título En defensa de los K con la firma de Damián Petruccelli.
Respondemos:


Estimado Sr. Damián Petruccelli:

Obviamente debemos responder, no nos deja otra posibilidad ya que su comentario nos toca en forma directa tanto a este Editor responsable de los contenidos del diario como a quienes integran el equipo de redacción. Vamos al punto.

Como notará nosotros encabezamos nuestra respuesta sin negarnos el uso de la palabra “estimado” cosa que ud. sí hace. Cabe entonces decir que ud. es estimado pese a no compartir nuestro criterio ni el de la mayoría de los colaboradores y lectores de PyD. Es ud. un compatriota más y por ello, entendiendo la diversidad en orden a la unidad como un valor ciudadano que debe recuperarse para lograr la pacificación nacional, tal condición es suficiente para que lo respetemos y valoricemos, porque la Argentina que viene debe incluirlo para no repetir el error de la que vivimos que solamente atrajo el caos, la desunión, la violencia, al exclusión y la vergüenza.

La iniciativa de UnoAmérica ha sido analizada editorialmente desde PyD con anterioridad y el interrogante que fundamentaba las notas publicadas siempre fue la misma: ¿Qué puede dañar más a la comunidad nacional? ¿La interrupción constitucional del mandato de Cristina Kirchner o la continuidad de su gobierno dos años más?
Habiendo instrumentos legales para detener el daño que están realizando quizá sea una irresponsabilidad política permitirles continuar con el desguace de la sociedad y el derrumbe de las instituciones. Nunca defenderse es, como ud. sostiene en su nota, “golpista y con una falta de criterio y sentido común.”
Es nuestro derecho defendernos y nuestra obligación defender a los más débiles, muchos de ellos manipulados por el discurso único, la propaganda mentirosa y la necesidad.

Ud. quiere saber dónde estábamos en los años ’90 cuando el gobierno del Dr. Menem. Acá nomás. Viviendo bien, con libertad, asadito de los domingos de por medio (aclaramos, no en el centro, en los barrios, con los “pobres”), creciendo, soportando airosamente cuatro crisis económicas internacionales y al final del denostado segundo mandato, recuperándonos de sus coletazos. Con errores, que quien hace se equivoca, pero satisfechos de la defensa de la vida desde la concepción (recuerde el Día del Niño por Nacer, iniciativa del Dr. Menem felicitada por SS Juan Pablo II e imitada por muchos países del mundo), de la pacificación intentada con los indultos y la reconciliación con el Almte. Rojas, de la incorporación de tecnología de punta a la Nación, del respeto internacional que permitía por ejemplo, ingresar a EEUU sin visa y de muchos innegables aciertos.
Y le recuerdo que la industria nacional que sufrió la competencia del mundo al que nos incorporamos, fue aquella que no invirtió adecuadamente y derivó –como era su costumbre- sus dineros a inversiones en el extranjero o en campos o en cualquier cosa menos en reconvertirse.
Cuando el Dr. Menem asumió la Presidencia de la Nación, le recordamos, vivíamos en la peor inflación que recordamos, en un país quebrado, con un Presidente –Alfonsín- incapaz de gobernar y al borde del estallido social.
Una Nación sin educación pues esta estaba profundamente ideologizada e invadida por el método de dominación gramsciano (continuado y maximizado por el kirchnerismo hasta el agobio) y en el cual la salud era una utopía, la del pobre, claro está.

Dice ud. que en el país nunca hubo un gobierno más corrupto que el del Dr. Menem. ¿Lo dice en serio?
Corrupción siempre hay y habrá, pero compare con el Banco Hipotecario Nacional y los pollos de Mazzorín de la Administración Alfonsín y con la barbarie corrupta que tenemos hoy.

Hoy... Este gobierno está tocando intereses de grupos económicos, es cierto, lo que interesa es ¿A beneficio de quién?
¿Hay menos pobres, mejor salud, menos droga y timba, los argentinos vivimos en paz reconociéndonos como hermanos, existe la solidaridad, los chicos pueden jugar tranquilos en la calle o ir en bici a la escuela sin que los asalten, las cerraduras de la década del ’90 alcanzan para defendernos de los ladrones, puede una anciana salir de compras portando una cartera, desapareció la prostitución infantil...? ¿Seguimos preguntando o se ocupa ud., estimado Sr. Damián Petruccelli de agrandar la lista?

Somos críticos de los gobiernos militares pero también de los desmadres terroristas, ¿tiene ud. al edad suficiente como para recordar la tranquilidad con que se podía transitar por las calles cuando gobernaban los militares?
¿Tiene edad como para recordar que antes, en pleno gobierno constitucional del Gral. Perón y posteriormente de su esposa, ir de compras a un súper era poner en riesgo la vida porque algún desaforado podría hacer estallar una bomba?
Hay luces y sombras siempre en la vida de los hombres como de las instituciones pero, estimado, no todo es malo. Dentro de poco podrá ud. vivir en una Argentina incendiada producto de la irreverencia con que estos que gobiernan hoy están haciendo las cosas. Luego no se queje, no diga que no se lo advertimos.

Un comentario necesario sobre la Iglesia: ¿Quién estuvo desde siempre junto a los pobres? ¿Quién educó a miles de chicos de barrios periféricos gratis? ¿Quién contuvo a las madres que pensaba en matar a sus hijos concebidos? Siga ud. con la lista también en este tema, sea sincero y verá que quienes atacan a la Iglesia no son exactamente los excluidos sino los nuevos ricos, la nueva oligarquía nacida a la sombra del kirchnerismo, los / las extremistas formales que viven muy bien gracias a los pobres que dicen defender. Vamos, no sea necio, no se deje embaucar por el discurso parcial e interesado de los que nos están llevando a la ruina y nos dividen.

Y para finalizar podemos asegurarle como periodistas expertos que con la nueva ley de medios no estará ud. mejor informado. Ya verá. No defendemos ni nos interesamos por los monopolios ni multimedios, ese es un problema empresarial, sí nos preocupa que quien tenga el manejo total de la información publicada sea el kirchnerismo. Lo dijimos editorialmente desde este diario, el problema no es la ley, es Kirchner, un especialista en corromperla y en eludirla.

Creemos que el proyecto de UnoAmérica, de prosperar, podrá beneficiarnos a todos deteniendo el derrumbe de la Patria. Dentro de la Constitución ha de ser para que sirva y no de otra manera. Dos años es demasiado tiempo vista la celeridad y eficacia con que el kirchnerismo destruye lo poco que nos está quedando. Claro que si no prospera será porque la sociedad política no lo desea y la comunidad no acompaña y también será bueno aunque sea a modo de enseñanza de lo que no hay que permitir a los gobernantes, de que hay que saber elegir, comprometerse, hacer valer los derechos ciudadanos.

Como ud. dice, “de eso se trata la democracia”.

Cordialmente, gracias por escribirnos.

PyD21 Oct 09

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